El Puente Romano de Córdoba

Por: Eva del Amo

El Puente Romano de Córdoba une el Barrio de la Catedral con el Campo de la Verdad, atravesando el río Guadalquivir. También se conoce con el nombre de “Puente Viejo”, pues es la única construcción de sus características que se ha mantenido en pie hasta la construcción del Puente de San Rafael, veinte siglos después.

El Puente Romano de Córdoba

El Puente Romano fue primero de madera, antes de ser levantado en piedra en el siglo I a.d.C. ya que se cree que la Vía Augusta, que unía Roma con Cádiz, pasaba por este punto.  

Mide 331 metros y aún conserva 16 de sus arcos, de los 17 originales. Desde la época de la Reconquista incorpora la Torre de la Calahorra, de carácter defensivo, y la Puerta del Puente en el otro extremo, que fue mandada construir por Felipe II al arquitecto Hernán Ruiz en el siglo XVI. La escultura de San Rafael, por su parte, es obra de Bernabé Gómez del Río, quien la levantó a mediados del siglo XVII.

El Puente Romano ha visto pasar a millones de viajeros durante su larga historia. Hace años, la Nacional IV pasaba por este punto, que era el acceso a la ciudad para quienes viajaban desde el centro de España. En el año 2004 se cerró al tráfico, en un acto que tenía como claro objetivo su conservación. Durante el año 2008 se sometió a un proceso de restauración con el fin de devolverle un aspecto lo más parecido posible al original, por lo que se limpiaron los tajamares, se descubrieron los sillares y se sustituyeron los adoquines por un suelo de granito.

Cómo llegar al Puente Romano de Córdoba:

El Puente Romano se encuentra en la Ronda de Isasa. La mejor forma de acceder a él es hacerlo a pie, pues no está muy alejado del centro de la ciudad.

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